lunes, 29 de junio de 2015

DIARIO DE FRITZL


26 de abril de 2015

     Siete. Los años que hoy se cumplen desde que todo acabó. Y el número de hijos que tuvimos. Y de nietos que me diste, claro. Pero sé que aún me recuerdas. Como yo a ti. Sabes que nunca conocerás un amor como el que yo te entregué, un amor que pocos mortales son capaces de sentir y, ni siquiera, de imaginar. Tú lo sabes, como yo sé que, en lo más profundo de tu ser, debes estar anhelando, tanto como yo, otros veinticuatro años de felicidad en nuestro nido de pasión. Aquel zulo en Amstetten.







(Relato presentado al Concurso Esta Noche Te Cuento. Tema: Monstruos).

jueves, 25 de junio de 2015

PEQUEÑOS Y PELEONES


DERECHOS FUNDAMENTALES

    Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado, gritaba cabreado algo sobre la imagen, la intimidad y el honor. Quizás esa era la explicación de por qué nunca antes, nadie había fotografiado a un gnomo.



TERAPIA EN COLORES

    Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado, trataba de evitar, inútilmente, acabar despanzurrado. Parecía no ser consciente de la balsámica belleza de sus humores en el caleidoscopio del cíclope.



FRANZ MICRORRELATISTA

    Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado parecía alterado. Presioné hasta aplastarlo y Samsa se acabó



DISEÑOS CON ARTE

    Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado duró poco. Presioné la lupa hasta despanzurrarlo contra el lienzo. Me olvidé de limpiarlo y allí seguía el día de la exposición. Luego alguien dijo que parecía una estrella, otros que un niño -abstracto, eso sí- con una moneda en la mano. Hoy es el logotipo de una entidad financiera y yo nunca me atreví a desvelar su origen.




(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado).

lunes, 22 de junio de 2015

PRUEBAS CON GASEOSA



     Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado, mostraba su ansiedad por escapar. En unos segundos, con el haz concentrado en su oscuro abdomen, un hilillo de humo precedió a la llamarada que lo redujo, enseguida, a una bola de ceniza. No tenía por qué no funcionar con el abuelo, luego, a la hora de la siesta.




(Relato seleccionado para la final semanal del concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Aquel ser diminuto que golpeaba la lente desde el otro lado).

viernes, 19 de junio de 2015

PENDIENTES DE UN HILO

    Quizás un ángel la ha bajado tirando de su hilo invisible. Ella se ha expandido colándose por resquicios de puertas, ventanas y chimeneas hasta ocupar el último recodo. Tras varios días con su espesa presencia, el alguacil, ¿quién si no?, descubre el noray al que estaba sujeta con nudo marinero. La nube, liberada, alza el vuelo llevando consigo afanes e ilusiones. Aunque la claridad vuelve, Voramar queda sumida en la más triste de las apatías. Ahora, sus lugareños, andan cerrando las manos al aire tratando de atrapar el fleco para traerla de nuevo y que devuelva lo que se llevó.




(Relato premiado en el I Certamen Internacional "Cuenta que te cuenta hasta 150", con la obra del artista Puñal que sirvió de inspiración y que aparece en la imagen).

martes, 16 de junio de 2015

EN EL PUNTO DE MIRA

FRANCOTIRADOR

Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle. Con la gorra de plato, sus gafas oscuras y la banda cruzándole el pecho condecorado, resultaba un blanco fácil. Pero de nuevo me dio el ataque de hilaridad. El atentado se frustró porque no podía evitar pensar en los previsibles y redundantes titulares del día siguiente.



CUESTIÓN DE REFLEJOS


Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle. Pero esta vez me sorprendió observar mi figura uniformada reflejada en la mirilla del suyo. Solo fue un instante.


OPCIÓN PERDIDA

Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle. En su rostro leía la duda, la preocupación y el nerviosismo mientras repasaba las posiciones propias y del enemigo. Él no lo sabía, pero le estaba dando una oportunidad de seguir viviendo si, finalmente, no ordenaba el ataque. Cuando, empuñando su arma, saltó de la trinchera iniciando el avance, mi proyectil le perforó la cabeza. Un borbotón rojo empañó su flamante uniforme de campaña. Idéntico al mío.


CUENTAS PENDIENTES

Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle. Era la hora acordada y, dados los antecedentes, ya había cobrado el trabajo, íntegro, por adelantado. Desde la azotea veía al objetivo, con su maletín de mano, esperando inmóvil en la esquina, a la puerta de la casa de mi cliente. Todo según lo previsto. Un único disparo fue suficiente. La absurda chistera rodó por la acera y los picos de su grotesco frac quedaron extendidos en el suelo. Desde la altura asemejaba la imagen de un cuervo estampado contra el asfalto.



HAZAÑAS BÉLICAS

Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle. El general japonés no dejaba de moverse a un lado y a otro y no resultaba fácil mantenerlo en el punto de mira. Mientras, los sonidos de explosiones, sirenas, disparos y alarmas parecían pugnar por romper mi concentración. Había mucho en juego y el acierto significaba la victoria. No habría otra oportunidad. Respiré profundo y apreté con suavidad el gatillo. Le alcancé en la frente y cayó abatido desapareciendo del escenario. Le regalé el peluche a Vicky y sentí que las probabilidades de nuestro primer beso, en el primer día de feria, habían aumentado significativamente.



CONSEJO DE FAMILIA

Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle. Era mi punto de mira, el que prevaleció, sobre el problema de la nueva relación de Fiorella.




(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Volví a enfocar su figura uniformada en la mirilla del rifle).

viernes, 12 de junio de 2015

INTANGIBLES

     La tarde le había ido bien entre contenedores. En las prácticas para obtener la diplomatura y poder ejercer la actividad, había encontrado diversos bártulos que se disponía a inventariar para el proyecto fin de carrera. Entonces, el teléfono de baquelita sin cables emitió un riiiing no escuchado desde hacía varias décadas.


—¿Eres tú? -dijo al otro lado de la línea una voz desconocida.

—Sí..., ¿cómo me localizó? -alcanzó a preguntar Diógenes sorprendido.

—Preguntando al once ocho ochenta y ocho; te llamo porque... -un pitido intermitente reemplazó a la voz. Le resultó tan peculiar que decidió incluirlo también en el inventario.




(Relato presentado al concurso Calendario 2016, de la Internacional Microcuentista. Inspiración en la foto propuesta).

lunes, 8 de junio de 2015

SALIDAS SIGILOSAS

RIESGOS DEL TABACO

     Salió, sigilosa, a estirar las piernas y fumar un cigarro. Después de ocho horas sin noticias de Catherine, el comandante hizo la llamada:

—Houston, tenemos un problema.


PAUSAS

     Salió, sigilosa, a estirar las piernas y respirar un poco de aire fresco. Después de veinte meses, no era la primera vez que se dejaba las llaves puestas y se quedaba dormido su atractivo e interesante secuestrador.


ANSIA DE MUNDO

     Salió, sigilosa, a estirar las piernas. Cuando su madre despertó, ya no estaba. Solo encontraron la placenta.


POBREZA ENERGÉTICA

     Salió, sigilosa, a estirar las piernas. A la media hora, cuando alcanzaron los dos metros, regresó y metió los zancos en la estufa.



(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Salió, sigilosa, a estirar las piernas).



martes, 2 de junio de 2015

¡QUE VIENE LA INQUISICIÓN!


RITUS INTERRUPTUS

—¡La Inquisición no tardará en llegar! -avisó una voz amiga desde fuera. En aquel momento, un gallo sanguinolento y descabezado correteaba aún por el tarot desparramado por el suelo, mientras la joven doncella, sorprendida y asustada, se tapaba con la casulla que el viejo fauno, presuroso, buscaba bajo el altar. Decididamente, no eran buenos tiempos para la lírica. 


VIDENTES

     La Inquisición no tardará en llegar, así que todos a sus puestos. Ya sabéis, a la entrada los echadores de cartas del tarot, la lectura de manos y la guija; en la zona de cultos la misa negra; y en el área de juntas, el aquelarre de gala. Recordad: tiene que salir todo a la perfección. Y vosotras, poned cara de brujas, nos jugamos el futuro turístico de Zugarramurdi.


MARCA CASTILLA

     La Inquisición no tardará en llegar y queda todo por hacer. Aún hay que montar la tribuna de autoridades, el pliego de acusaciones y cargos está a medio redactar, la leña para la hoguera por recoger... Y ni siquiera tenemos a los reos. Habrá que pedir voluntarios.


EMOCIÓN

   «La Inquisición» no tardará en llegar a la meta del Grand National, con más de dos cuerpos de ventaja sobre «Turquesa», la favorita en todas las apuestas. Emocionado, Sir Edward Lancaster, propietario de la ganadora, no puede creer que aquella yegua, a la que bautizó inspirándose en su suegra, llegara a proporcionarle tanta alegría.



PRUEBA DE AMOR

     La Inquisición no tardará en llegar para otra sesión. Espero que sea la última porque no sé si podré aguantar más. He soportado hasta ahora todo tipo de interrogatorios, tormentos y torturas pero siento que las fuerzas me abandonan. A veces he estado a punto de rendirme, de escupirle a la cara: sí, son ciertas sus sospechas, soy un truhán, un buscavidas, un malvado y me importa un comino su poderío y su herencia. Por suerte he podido contenerme, y es que me gusta tanto su hija...



(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: La Inquisición no tardará en llegar).