DÍAS SEÑALADOS

Cogió el primer tren. Gonzalo, de pronto, había sentido la necesidad de estar con sus padres y hermanos después de más de cinco años sin visitarlos. Desde que empezó a vivir con Adela. Es 20 de diciembre y va solo. Antes de salir de la estación ya la echa de menos. Recuerda su sonrisa, su dulzura, su cariño... También su genio, casi tan fuerte como el suyo propio. Añora ahora los viejos momentos de risas y villancicos en la casa familiar. Calcula que serán solo tres días, a lo sumo cuatro. Después ya vendrá la policía, el juez, la prensa… Esta Navidad sería distinto.

(Relato mencionado en el concurso ENTCerrados del blog Esta Noche Te cuento. Frase de inicio obligada: Cogió el primer tren. Frase de cierre obligada: Esta Navidad sería distinto).

LA CITA

Se presentó en la red de contactos como «ParaguaYo», residente en Alcobendas, maduro, clásico, pero todavía flexible. Denotaba cierto egocentrismo. Ella lo hizo como «Umbrellina», de lunares rojos sobre azul celeste, joven, de la Toscana y abierta a nuevas amistades y experiencias. Convinieron en conocerse en el parque, en un banco frente al estanque; él iría colgado del antebrazo de un pensionista de Correos y ella de la mochila «Hello Kitty» de una adolescente. No habría confusión, era verano y el día estaba despejado.

(Relato presentado al concurso del Club de los Paraguas Perdidos. Tema: personaje paraguas).

ARTURITO Y SU CAJA DE COMPASES

EMPIEZA EL CURSO EN WISCONSIN

Antes de ver lo que Arturito, el repetidor, llevaba en su caja de compases, la grande, ya intuí que sería un fusil. De repetición, claro.

SINÓNIMOS Y ANTÓNIMOS

Antes de ver lo que Arturito, el repetidor, llevaba en su caja de compases, todos sospechamos que serían los problemas imposibles de geometría bien resueltos. Así debía ser para sacar la matrícula de honor, como en el resto de asignaturas y como en cada curso desde que empezó el bachillerato. Lo de repetidor, además de por no llamarle brillante, era por su propensión silábica reiterativa. Y porque la seño, desde el principio, nos prohibió llamarle el ta-ta-ta-tartaja.

NECESITA MEJORAR

Antes de ver lo que Arturito, el repetidor, llevaba en su caja de compases, encontramos a don Álvaro, el profesor de geometría, con un semicírculo graduado pendiendo de su oreja derecha, de cuyo interior sobresalía el mango de un tiralíneas, mientras que por uno de los orificios nasales asomaba la punta de un punzón, y del ojo izquierdo el compás por la parte de la mina de grafito. De nuevo parecía que Arturito se había vuelto a atascar con la bisectriz.

(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Antes de ver lo que Arturito, el repetidor, llevaba en su caja de compases).

FELINOS INHIBIDOS

SUPERSTICIONES DE EMPERADOR

Con su gato Mishi, que no participó en las batallas, conquistó media Europa. Creía que le daba suerte y lo llevaba siempre consigo. Pero temía que alguien pudiera echarle el mal de ojo. Por eso lo ocultaba en el gorro en forma de tobogán, que él mismo diseñó al efecto, o bajo el chaleco, agarrado por el cuello con su mano derecha.

MISHI...NG

Con su gato Mishi, que no participó el día anterior en la decisión familiar, se celebró la comida por el segundo aniversario del fin de la contienda. No faltó nadie. A los adolescentes no les extrañó la presencia de caracoles en el plato, los solían ver por el campo después de un aguacero. Tampoco la abundancia de arroz, seguro que habrían juntado las cartillas de racionamiento para conseguirlo. Pero lo del conejo… Si ni siquiera en el mercado negro se podía encontrar. Alguien dijo haber visto después al minino con unos feriantes, pero cualquiera sabe.

CASOS DIFÍCILES

Con su gato Mishi, que no participó nunca en los crímenes, se fugó al extranjero el conocido como «asesino invisible». A falta de mejor pista, la Interpol distribuyó por todo el mundo la foto del minino. De frente y de perfil. 

(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena. Frase de inicio obligada: Con su gato Mishi, que no participó).

MENOS VIDAS

COCINA AUTÓCTONA

No es cierto que tengan siete vidas. Si así fuera, tendría para seis días más de carne en el Menú del náufrago. 

SUBCONTRATAS

No es cierto que tengan siete vidas en su haber. Acreditadas no llegan a media docena. El resto solo heridas, contusiones y fracturas, nada definitivo. Para gestionar nuestros Centros Geriátricos de Beneficiencia necesitamos empresas con mejor currículum.

LEYENDAS FELINAS

No es cierto que tengan siete vidas ni que por la noche todos sean pardos ni que se coman la lengua de los niños, todo eso ya lo tengo comprobado y certificado. Ahora llevo ya tres mil gatos inspeccionados y de momento ninguno tiene tres pies. 

HAGIOGRAFÍAS DE PREMIO

No es cierto que tengan siete vidas de santos, recopiladas en un relato de no más de cien palabras, por si el lunes, en el concurso, ponen una frase de inicio que le vaya al pelo. Pero bueno, ahí dejo la idea.

LOS LÍMITES DE LA SUPERVIVENCIA

No es cierto que tengan siete vidas. La Missi, sin ir más lejos, sobrevivió a tres caídas desde el alero en noches de ronda y a un escobazo de doña Patro cuando husmeaba en la bolsa del pescado. Pero una segunda convocatoria electoral, en tan poco tiempo, le resultó incompatible con la vida.

EXCEPCIONES

No es cierto que tengan siete vidas todos. Los hay con más. Casi cincuenta años tiene ya el gato que está triste y azul. Y ahí sigue. 

INFIDELIDADES

No es cierto que tengan siete vidas. Ni que el perro sea el mejor amigo del hombre. La camada de mininos de mi novia falleció al poco de nacer. Primero mi Ringo me ayudó a consolarla, cuando ya se le pasó se fugó con ella. 

(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: No es cierto que tengan siete vidas).

AD CALENDAS GRAECAS

La situación ya no era sostenible. El clima aconsejaba abrir puertas y ventanas para que corriera un poco de aire y aliviar así el bochorno, pero la acumulación del residuo orgánico de todo el barrio, en el solar de enfrente, no permitía ni respirar. Planteado el problema en la junta de vecinos, alguien propuso acudir a la justicia para resolver el problema, otro dijo que se demoraría mucho la solución; entonces intervino don Marcelus Quintus, tribuno en el Senado, para informar de que no sería tanto, que ya estaban redactando el primer borrador del Derecho Romano.

(Relato presentado al concurso Microrrelatos Abogados. Palabras obligadas: Justicia, sostenible, residuo, clima y respirar).