martes, 27 de noviembre de 2018

CAMBALACHE



...que el que no llora
no mama
y el que no afana
es un gil.


Los hermanos Trobiani, Néstor Jesús y Malena, actúan en una esquina de la calle Brandsen, cerca de La Bombonera. Cuando observan la llegada de algún bus de turistas, conectan el magnetofón y, a los sones de Gardel, se marcan un tango muy sensual y académico. Ella con buen tacón, para equilibrar alturas, y vestido ajustado abierto desde el muslo. Él, con traje de época y sombrero gaucho. Enseguida, los visitantes les hacen corro y utilizan sus cámaras para inmortalizar el momento. Al acabar la pieza, aplauden las habilidades de la pareja con los pies y dejan unas monedas sobre el asfalto. Si alguno hubiera sido más generoso y hubiera echado mano a la billetera, habría percibido antes su desaparición. Y es que Mauro Luís, el menor de los Trobiani, tiene las habilidades en las manos.


(Relato presentado a la ronda 4, dedicada a la danza, del concurso Monstruoscopio, del blog Esta Noche Te Cuento, con el seudónimo de Withney Houston).

martes, 20 de noviembre de 2018

BUEN APETITO

EXPEDITIVE SOLUTIONS S.A.
Nos comimos a unos cuantos vecinos para no defraudar. Una vez resuelto el asunto de la morosidad, nos fuimos a ofrecer nuestros servicios a otra Comunidad de Propietarios.


VENDEMOS PISO
Nos comimos a unos cuantos vecinos para no defraudar. Con ello quedaba resuelto lo de «comunidad reducida». Ahora solo faltaba arreglar lo de «excelentes vistas en un entorno paradisíaco» y ver qué hacíamos con el estercolero comarcal de ahí enfrente.


CONVENCIÓN
Nos comimos a unos cuantos vecinos para no defraudar en nuestro primer encuentro de tribus antropófagas.





(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Nos comimos a unos cuantos vecinos para no degfraudar).

sábado, 17 de noviembre de 2018

RESISTIR ES VENCER

Indefectiblemente, cada viernes, a media tarde, recibimos el habitual ataque. Primero con la descarga furiosa de agua templada que provoca desbocados torrentes cuyo arrastre debemos evitar. En un principio pensamos que era cosa de la naturaleza, pero su repetición sistemática cada siete días nos llevó al convencimiento de que se trata de una acción premeditada y hostil. Afortunadamente, vivimos en un medio muy frondoso y podemos agarramos a troncos o tallos y esperar a que escampe. Antes de que desaparezcan los últimos riachuelos, llega la descarga química que nos cubre de una espesa espuma de la que nos protegemos aguantando la respiración. A continuación, otra lluvia torrencial, y de nuevo toca aferrarse a un plantón seguro. Tras las últimas gotas, el enemigo repite su estrategia de cada semana y provoca vientos de fuerza ciclópea con la intención inequívoca de expulsarnos del territorio por los aires. Por último, tratan de gasearnos. Una nube tóxica que entumece temporalmente fauna y flora se expande por nuestra selva; adheridos a la corteza aguantamos. Siempre sufrimos algunas bajas pero en la siguiente acometida ya somos muchos más. Así que no, no va a ser fácil acabar con nuestra prolífica comunidad de liendres y piojos.



(Relato presentado al concurso del blog Esta Noche Te Cuento, inspirado en la foto de Víctor Lax que lo acompaña).

martes, 13 de noviembre de 2018

DE HABLADURÍAS

GAUDEAMUS IGITUR
Para que luego digan que los monstruos somos nosotros. Los de tercero están ahora mismo en el patio jugando al fútbol con la cabeza. Nosotros la habíamos dejado, cuando el bedel dejó de pestañear, en el baúl de objetos perdidos.



Y NOSOTROS MÁS
Para que luego digan que los monstruos somos nosotros nos hemos ido todos al cirujano plástico. A papá le han abierto otra boca en la frente; mamá lleva ahora pechos en los pómulos y mi hermana un ojo en la barbilla. Al abuelo le han trasplantado las rodillas a la cabeza y a mí me han injertado un brazo en cada oreja. Ahora, los vecinos del 4° b pasarán a ser, solo y simplemente, la familia Addams.



(Relatos presentados al concurso Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Para que luego digan que los monstruos somos nosotros).

viernes, 9 de noviembre de 2018

LAS DOTES DE OBSERVACIÓN DE LOS MÚSICOS FRUSTRADOS

Era consciente de que abrirme camino en el jazz y en Nueva York no sería nada fácil, que además de habilidad y talento, neceSItaba mucho trabajo en LA SOLedad FAscinante de MI apartamento, REpitienDO notas en el saxo infinidad de veces. Así que empecé a practicar todos los días, desde bien temprano hasta casi el anochecer, a pesar del vecino de al lado, el señor Madison, un hombrecillo insignificante y melifluo, del que desconocía qué trabajo nocturno tendría, porque pretendía descansar justo cuando yo realizaba mis ejercicios musicales. Naturalmente, yo no estaba por distraer mi empeño e ignoré todas sus quejas y amenazas, que terminaron hace dos semanas cuando, furioso y enrabietado, decidió mudarse a otro piso más tranquilo. Mientras cargaba sus pertenencias en el camión de las mudanzas le dediqué desde mi ventana una esplendorosa peineta que le encolerizó aún más.

Hoy acudí a una prueba importante que podía significar el inicio de mi gran carrera en el mundo del jazz. Nada menos que en el Cotton Club. Tendría media hora para mostrar ante el gerente del local mis habilidades de saxofonista. Solo estuve un minuto, pero ya he descubierto la ocupación del señor Madison.


(Relato presentado a la ronda 3, dedicada a la música, del concurso monstruoscopio, del blog Esta Noche Te Cuento, con el seudónimo de Withney Houston).

                  

martes, 6 de noviembre de 2018

ÚLTIMOS FAVORES

LECTURAS ÚTILES
Era lo único que podíamos hacer por él, dadas las circunstancias. Además, en el pasillo era ya una tradición que se iba transmitiendo a los nuevos inquilinos año tras año. Unas horas antes de su cita, le hicimos llegar el ejemplar de «Los 100 mejores últimos deseos», de la editorial del penal.


NÁUFRAGO
Era lo único que podíamos hacer por él, dadas las circunstancias. En el biplaza no cabía, así que, antes de emprender el vuelo de regreso, le dejamos la guía telefónica.



(Relatos presentados a Relatos en Cadena, de la SER. Frase de inicio obligada: Era lo único que podíamos hacer por él, dadas las circunstancias).

jueves, 1 de noviembre de 2018

INVENTOS QUE CAMBIARON EL MUNDO

Me desperté más entumecida que de costumbre. Como pude me incorporé y frente al espejo me vi como la mismísima Estatua de la Libertad. Entonces entendí las palabras de mi amante de aquella noche, cuando me dijo que le gustaba mi carácter liberal pero que me encontraba fría como cobre en la ribera del Hudson. Menos mal que no había repetido con el de la noche anterior, que me decía que era la chica más guarra con la que había estado, porque en ese momento tendría pezuñas y rabo de sacacorchos. Recordé que, en el interior de la figura más pequeña de la matrioska que me regaló el ruso de la semana anterior, guardaba un prodigioso relajante muscular que podría devolverme flexibilidad y elasticidad. Abrir las cinco muñequitas con una antorcha en una mano y un libro en la otra forma parte de la invención del abrefácil, pero esa es otra historia.



(Relato presentado a la ronda 2, dedicada a la escultura, del concurso Monstruoscopio, del blog Esta Noche Te Cuento, con el seudónimo Withney Houston).